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Hoy me siento muy triste y no voy a decir porque... pero hay muchas lecciones que aprender

CHIQUEONES

Conforme ha pasado el tiempo me descubro más, había olvidado todo lo que me gusta hacer intercambiándolo por actividades estructuradas con el fin de hacerme una mujer infeliz y tómala que he recordado ser una persona chiqueona y detallista. Todo esto ha traído como consecuencia nuevas amistades y formas de vivir, al grado que mis ojillos ahora brillan de diferente manera y casi todo el tiempo estoy sonriente.





He recordado que me encanta que me regalen sorpresas, me marquen a horas prohibidas, bailar con "por fin" alguien que SÍ sepa bailar (eso es muy importante para mí), me regalen flores BLANCAS, cartitas, detallitos, que me abran la puerta del coche no solamente al subir sino al bajar también, sentir que la delicadeza femenina es más importante, me fascina darme mi tiempo, mi espacio, ir a cafés y bares, conciertos, otras ciudades, leer, escoger mis ropas sin pensar en nadie más, ir al cine sin importar la hora, llenar mi cuarto de velas, ir a cenar a lugares hermosos, sin duda, es lindo, lindo volver a convivir con personas que no han olvidado su esencia y valores primordiales.
A mí me encanta que me chiqueen todo el tiempo, me abracen fuertotote aunado a chorromiles de besitos de piquito en toda la cara, que cuando hablamos las miradas estén posadas en los ojos contrarios sin que nada ni nadie pueda evitarlo.
A mí me encanta chiquear y que me chiqueen.